¡Dios se lucio creando a la mujer!, nos dio exactamente lo que necesitábamos, vio lo que al hombre le faltaba y puso en la mujer el complemento perfecto. Tan bella es la mujer en todo sentido, tan sensible, tan cariñosa, tan llena de paciencia y tolerancia, tan sabia ella, tan astuta, tan precavida, tan audaz, tan fuerte y la vez romántica, la mujer es una obra maestra que solo el Maestro podía crear. Le dan un color hermoso a nuestra vida, nos hacen sonreír, soñar, planear, suspirar y hasta llorar de felicidad al darnos cuenta lo importante que son en nuestra vida y lo bien que hizo Dios al crearlas.
Fotografía hecha por Enrique Monterroza